Ejemplos reales de Biostasis pueden ser encontrados a nuestro alrededor en la naturaleza.
Si bien ahora sabemos que podemos poner a las personas en Biostasis a través de la criopreservación, aprendimos sobre el concepto al observar la naturaleza.
Los cuerpos de algunos animales se enfrentan a cambios ambientales extremos sin tener que adaptarse conscientemente a ellos. Comprender cómo logran esto y replicarlo en humanos podría abrir un mundo de posibilidades.
Entonces, ¿qué ejemplos de Biostasis conocemos en la naturaleza y cómo podemos usarlos?
Ranas congeladas
Las ranas de bosque de Alaska pueden sobrevivir hasta siete meses completamente congeladas antes de descongelarse nuevamente. Dos tercios del agua de su cuerpo se congela, se vuelven completamente rígidas y su corazón deja de latir. Pero no mueren.
Al iniciar el invierno, el hielo llena rápidamente el pecho de la rana de bosque y encierra todos los órganos internos. Se forman cristales de hielo entre las capas de su piel y sus músculos. Simultáneamente, el hígado de la rana produce grandes cantidades de glucosa que ingresa a todas las células del cuerpo.
Este es el componente clave para permitir la supervivencia de la rana. La glucosa evita que las células se congelen y se une a las moléculas de agua dentro de las células para evitar la deshidratación por ósmosis.
Luego, la rana permanece completamente inactiva y congelada hasta que vuelve la primavera, cuando milagrosamente se descongela. Se desconoce cómo la rana puede reiniciar su sistema circulatorio. Es capaz de soportar condiciones que serían fatales para casi todos los demás animales.
Letargo
Para que sean posibles largos períodos de Biostasis, algunos animales usan el letargo. Aquí es donde la tasa metabólica y la temperatura corporal de un animal disminuyen naturalmente. Este proceso lo utilizan los animales que entran en hibernación o estivación. Sin embargo, algunos animales pueden utilizar parcialmente esta técnica sin hibernar por completo. Esta es una forma importante de conservar energía en cualquier época del año.
El letargo permite períodos prolongados de inactividad en los que los animales no se ven afectados por su entorno. Un ejemplo de esto es la hibernación, que ocurre durante los meses de invierno. Lémures, erizos, ciertas ranas, zorrillos, abejorros y, como es sabido, marmotas, todos hibernan.
La estivación es un proceso similar, pero inverso, que ocurre en animales que deben sobrevivir a los calurosos y áridos meses de verano. Se encuentra más comúnmente en algunas serpientes, ranas, lagartijas y tortugas. Los animales pueden permanecer en una animación suspendida para evitar daños por calor en sus cuerpos cuando aumentan las temperaturas.
Hipotermia accidental en humanos
Después de un accidente de esquí, Anna Bågenholm quedó sumergida bajo un lago helado en Suecia durante 80 minutos. CLogró encontrar una bolsa de aire debajo del hielo y permanecer consciente durante 40 minutos antes de un paro circulatorio.
Una vez que pudieron sacar a Anna de debajo del hielo espeso, la llevaron de urgencia al hospital. Su temperatura corporal se registró a 13,7 °C, la más baja jamás observada en hipotermia accidental.
Se notó que al llegar al hospital, estaba completamente blanca, sus ojos estaban dilatados y mostraba todos los signos de estar muerta. El electrocardiograma (ECG) mostró una línea plana consistente. Pero el médico sabía que primero había que calentarla antes de que se pudiera declarar la muerte.
Gradualmente, su sangre se fue calentando fuera de su cuerpo, antes de ser bombeada nuevamente, para evitar dañar su sistema circulatorio. Tomó varias horas pero, finalmente, su corazón comenzó a latir nuevamente y su temperatura corporal volvió a la normalidad.
Finalmente se recuperó por completo, demostrando que los humanos pueden soportar condiciones extremas. La dificultad radica en lograr esto de una manera más segura.
Biostasis para sobrevivir
Comprender las formas en las que los animales pueden no verse afectados por el paso del tiempo sería extremadamente ventajoso para los humanos. También nos permitiría colocar en suspensión a personas que actualmente se consideran intratables, extendiendo así "la hora dorada".
La Biostasis en humanos tiene el potencial de salvar vidas. Si fuéramos capaces de aprovechar un periodo prolongado antes de que las lesiones graves sean mortales, salvaríamos innumerables vidas. La criopreservación nos da la oportunidad de entrar en la Biostasis una vez que hayamos muerto hoy con la esperanza de un tratamiento en el futuro.
Una vez en este estado, los procesos que se producen tras la muerte se detienen por completo. Impide que las células sigan degradándose, por lo que no nos afecta el paso del tiempo. Sin embargo, aún no es posible revivir de este estado.
Pero, somos capaces de permanecer en Biostasis hasta el momento en que sea posible. En ese momento comprenderemos la Biostasis en los animales y la utilizaremos en nuestro propio beneficio. Una vez que la reanimación sea posible, despertaremos de nuestro letargo en el futuro, como una marmota al comienzo de la primavera.
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